martes, septiembre 12, 2006

¿Teatro escolar?

Volví del supermercado y le di una paliza a mi hijo.
Volví y me di cuenta de que había comprado dos o tres veces
las mismas cosas.
Y que, para colmo, había comprado un montón de cosas que odio.
(...)
Y me olvidé de comprar lo que realmente necesitábamos, joder.
Me olvidé de comprar las cuatro chorradas que necesitábamos, joder.
Y me pillé un rebote de la leche.

Abro la puerta y le suelto a mi mujer:
Cariño: creo que esta tarde va a haber hostias para todo el mundo; creo que hoy se rifan hostias
Y tú y tu hijo tenéis todos los boletos.
Y mi mujer me mira y se ríe porque piensa que estoy de coña.
Y es ahí cuando le suelto el primer guantazo a mi mujer.
Por andarse con chorradas.
Y cae contra la mesa de la cocina y se ríe.
¡Conserva el buen humor, la tía!
¿Compraste algodones?, me dice.
Pásame uno, joder.
Y yo me pongo de los nervios,
Porque me olvidé de comprar algodones
Y alcohol y agua oxigenada,
Y un montón de cosas que tenía que comprar.
Y traigo a casa el coche lleno
De mierda que no va a servir de nada, joder,
Y eso me jode tanto que le digo a mi mujer:
Mira, te voy a dar una hostia más a ti
Y me voy a liar un rato con el niño.
Y le doy una hostia y la tía se marcha a por algodones,
Y yo me voy a buscar al niño y a darle lo que se dice
Una buena mano de hostias.

Y compré pilas para la Game Boy del niño
Que no eran del tamaño adecuado, joder.
Y cuando el niño me dice:
Las pilas que compraste
Para la Game Boy son pilas que sirven
Para la radio y para el despertador
Pero no sirven para la Game Boy,
Le suelto la primera hostia.
A tu padre tú no le hablas así.
Y le cae la segunda hostia.
La segunda hostia y la tercera hostia.
La tercera hostia y la cuarta hostia.
Y así sumo hostias hasta que ya estamos en condiciones
De llamarle a todas esas hostias juntas
“Una mano de hostias”.
Y sigo dándole de hostias hasta que a aquello ya se le puede llamar
“una BUENA mano de hostias”.
Se convierte en una auténtica paliza.
Y cuando veo que ya se me va la mano
-bonita frase: “Se me va la mano”-
paro.
Porque hay que evitar ir al hospital y explicar a desconocidos
-lo que se dice: ventilar-
los asuntos familiares,
que son lo más importante de tu vida y lo que
más amas en este mundo.
Porque es lamentable y degradante andar de hospital en hospital
Aireando tu vida privada.

Rodrigo García

Utilizaste este texto en la obra escolar del año pasado. Evidentemente, el tema general era el de la violencia, en todas sus manifestaciones. Escenario oscuro, foco sobre un lateral, música (“Loco”, de Macaco). El actor era ya ex alumno, 20 años, un fiera. No le importó colaborar con un grupo en el que había chavales de entre catorce y dieciocho (estos, los veteranos, compañeros suyos en el grupo durante los tres años anteriores). Se preparó muy bien el texto: quedaba impresionante. Salía a escena empujando un carrito de supermercado, lleno de paquetes, frascos, botellas, hasta arriba. Un chándal, reloj de oro, medallones… Unos segundos de silencio, y decía su texto al público.
Tuvisteis espectadores de todas las edades que hemos dicho antes… Risitas cada vez que el personaje “da hostias” a su mujer o a su hijo… Probablemente risitas nerviosas. En los ensayos, algunos días, se os ponía la piel de gallina… Los profes asistentes te decían que no comprendían esas risitas… Aparecían también en otros casos, sobre todo en la escena que dedicasteis al acoso escolar… Y es que están muy acostumbrados al humor macabro del gore, imaginamos, y ante textos como este, la primera reacción es tomárselos a cachondeo. Sí, sí, cachondeo…
Los “expertos” suelen decir que el teatro de Rodrigo García es falsamente provocador, porque va dirigido a nosotros, los ya convencidos… Bien: tu intención ha sido llevarlo a lugares en los que no tienen ni pajolera idea de qué es eso de la provocación teatral… Lenguaje bestia y descarnado en el templo de la hiper-corrección… La escuela, donde la teoría dice que todos debemos ser inmaculadamente solidarios, bien-hablados, bien-olientes, majetes y simpáticos… Y donde algunos gamberros campan a sus anchas, con boquitas de las que salen textos peores que los de Rodrigo pero, además, en serio… Realmente, no sabes si has cumplido ni siquiera parte de tu objetivo pero, al menos, la imagen que los espectadores (pasados y presentes, ya llevas siete años con esto) juveniles se llevan de lo que es el teatro es algo diferente a los estándares habituales, y más próxima a lo que está sucediendo en los penúltimos reductos de teatro vivo y punzante: las salas alternativas.
Y , encima, te lo pasas pipa…

5 Comments:

Blogger Marga said...

Tan pipa como lo pasé yo leyendo el texto...

Los expertos siempre hablan y bla, bla, bla...

La provocación, que nunca es tal salvo una forma distinta de mostrar la realidad buscando una respuesta y a ser posible sincera o visceral, suele causar "risitas" que enmascaran la incomodidad. Imagino que entre adolescentes no debe ser muy distinto. Prefiero que crezcan con visiones dispares que con la del buen olor; en cuanto salen al patio o a la vida, ese olor se disipa...

Jo, tú si que te lo pasas pipa!! jajajaja

Besosssssss convencidos

11:57 a. m.  
Blogger Cronopio444 said...

Marga, rápida como el viento... casi no me da tiempo a escribir el post... me alegra de que te haya gustado. La verdad es que me convertí hace unos años en fan de Rodrigo García, y procuro no perderme nada de lo que hace... Su grupo , La Carnicería (el nombre dice bastante) es imprescindible...Además, mucha gente joven ha cogido ese camino y aunque algunas veces lo "imitan" sin más, hay bastantes buenos montajes circulando por ahí...En fin, seguro que sale más veces...
Besos de incomodador aficionado...

6:14 p. m.  
Blogger MaLena Ezcurra said...

Hummmm que texto y que contexto.

Rodrigo Garcia sacude.

Las risitas siempre estan ante ciertas manifestaciones, que nos hacen ver cosas que no tenemos asumidas, como el sexo, la violencia y demas demas incomodidades.

Las aristas inagotables de nuestra mente.

Abrazos florecidos de primavera etrusca.

Nos encontramos y son mas de tres palabras. :)



Marga bla bla bla :*** somos expertas.

10:25 p. m.  
Blogger Cronopio444 said...

¡Malena, qué estupenda sorpresa! Seguiremos compartiendo sacudidas diversas, si los espacios y los tiempos nos lo siguen permitiendo... Besazos saltarines.

10:27 a. m.  
Blogger Cronopio444 said...

Oceánida, el agradecimiento es mío. Espero poder seguir sorprendiéndote... ¡y sorprendiéndome! Saludos.

10:29 a. m.  

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