jueves, junio 22, 2006

INTERIORES

Mirada interior: presentimiento de mierda en estado puro. ¿Puede la mierda ser pura? Cuidado y detenido trabajo de disimulo: mi interior, te dices, es tal y como lo vuelco hacia el exterior, delicia al alcance sólo de selectos paladares. Mentira cochina. Detallar cada gramo de materia putrefacta nos llevaría tratados de miseria exhaustivos, para los que nunca tendremos tiempo. Dicho esto: pasemos a otra cosa. ¿Por qué? Porque no tiene sentido hurgar para extraer petróleos insostenibles. Y si tiene sentido te da igual: duele y no soluciona nada. ¡Perfeccionemos el disfraz!
Delicioso arlequín de mirada impoluta. Saltimbanqui sobre el alambre tendido entre edificios blancos, con balcones blancos y señores con batas blancas, se diría que escapados (o no) de sanatorios universales: aquí, oiga, lo curamos todo. ¡Qué bien! Te guiña un ojo instantes antes de resbalar y caer de cabeza sobre el asfalto (blanco) de la ciudad (blanca) que ni es Lisboa ni sale en la película de Tanner, ni actúa en ella Bruno Ganz, ni siquiera un poquito. Asfalto blanco derivando al rojo en oleadas sanguinolentas: el interior que se escapa por la herida… Intento fallido. ¿Volvamos a empezar?
¿Desde el principio? Nazcamos de concepción inmaculada. Lo tienes claro: vaharada mística que te crió. Peligrosísimas esas concepciones sin conchas, ni carajos, ni leches, pero con muchas hostias, y muy consagradamente libidinosas, pero sin pecado, ¿eh?, sin nada de pecado… Mojar buñuelitos en jícaras de chocolate caliente y apestar a sotana que nadie lavó desde Dios (¡claro!) sabe cuándo, encender cirios y encargar la propia misa de difuntos para andar, después de muerto, zascandileando bajo los reclinatorios, al intento de atisbo de bragas de beata…¡Deliciosa perspectiva de futuro!
Volvamos pues al presente, yoes aquí congregados. Aceptemos lo inevitable (¿inaceptable?). Ustedes y yo, te sigues diciendo, en animado monólogo airosamente conversado, somos los que somos: muchos y sólo regularmente avenidos… ¿Por qué no nos dejamos en paz de una puñetera vez, cada uno a la suya, y la suya en la de todos o como carajos, leches, hostias sea que se diga eso que se dice pero que no quiere decir nada? Volvamos al presente.
Aquí estás, te dices, feliz de haberte conocido. Y un poquito asqueado también, para qué vamos a mentir…

9 Comments:

Blogger majorova said...

Voy visitando blogs, antes lo hacía solo como lectora, pocos, debo reconocer, me estimulan. Te seguiré leyendo.
Saludos

1:20 a. m.  
Blogger Marga said...

Mochilitas de mierda las llamo yo, las mias, las de todos. Inevitables irlas formando y llenando (además, por qué todo habría de ser limpio? aspiraciones místicas para las que no tengo tiempo ni ganas aunque me guste ser bambi y pensar que es posible, que fuera porque sí, por ser blanco). Y es lo que yo me digo, que existen, vale, ahí están dentro de cada cual, pero señores que cuando salpiquen mierda sea lo menos posible e intentar que no a los que nos rodean. Y encantada de habernos conocido: la coherencia, asqueados: La inconsistencia. Y más, muchos más yoes.

Ey que somos humanos!! pelín evolucionados pero no tanto... jeje

Besossssssss de mi dedo oponible

10:06 a. m.  
Blogger Cronopio444 said...

Gracias, majorova, por tu comentario. Prometo pronta visita.

Totalmente de acuerdo, Marga. Pero estas reuniones de yoes alterados nos remueven un poco cuando empezamos a notar que las "mochilitas" se nos solidifican en exceso... Besos de pulgares mareados.

6:22 p. m.  
Blogger Marga said...

Gracias, señor cronopio!!

Y eso... que las prisas nos dejen de lado!

Besosssss tortuga

12:29 p. m.  
Blogger MaLena Ezcurra said...

que queres que te diga, que vos ya no sepas.

nada es tan blanco nada tan negro.
nadie tan sabio nadie tan necio.

quizas sea una ilusionista de mierda o solo justifique mi lado oscuro.

quizas todo es mas simple y solo llueve en Buenos Aires.

abrazos de sabado.


Eyyyy Margotita y si armamos una sucursal del Mac aca en la casa del Cronopio ;)

11:52 p. m.  
Blogger Marga said...

Jajaja malenilla... hacemos de okupas también en su cueva?

Señor cronopio disculpe el abordaje... debe ser que llueve en Buenos Aires y Malenilla linda acaba por desbaratar los espacios. Esto de las fronteras nos trae de cabeza, tanto acullá o acuacá!

3:03 a. m.  
Blogger Cronopio444 said...

No, si yo encantado... Desde que me reconvertí en Cronopio Patagónico (las mayúsculas las pongo yo) lo de las fronteras y las propiedades como que me la traen al fresco... La lluvia de Buenos Aires, de momento, me da envidia, ventilador por medio... ¡Ah, y disfruté como un enano este diciembre en Ushuaia!
Besos antárticos (¡ojalá!)

11:30 a. m.  
Blogger Mac said...

De acuerdo contigo, como no.. aunque mi matiz es que la elección es abrir el saco de mierda o el de belleza, que también hay uno de esos en cada uno de nosotros. Mirar al pasado para lo que merezca la pena, lo demás que se lo lleve el olvido, ójala se llevara todo lo oscuro, pero quiza no seriamos nosotros, nadie existe sin su sombra!!¿no crees?

7:04 p. m.  
Blogger Cronopio444 said...

Desde luego, arenamovediza, en eso estamos. Acarreando sombras, mientras le hacemos guiños al sol y jugamos a buscar combinaciones nuevas, líneas de fuga inesperadas...

7:13 p. m.  

Publicar un comentario

<< Home